La Quebrada Santo Domingo, sitio arqueológico ubicado en Laredo, Trujillo, es víctima de invasores en sus tierras pese a ser una zona declarada como intangible.
En una visita al lugar, el fotógrafo José Carlos Orrillo denunció este hecho, ya que se captó pozas de agua, vías de acceso -como construcción de veredas para motos- y mangueras para actividades agrícolas.
«Hay varios pozos que son para riego, el agua la sacan del canal cercano, la acumulan y están regando puesto que la zona está llena de plantones frutales. Lo más inaudito es que han hecho una vereda larga, para que pase una moto, hay una inversión fuerte de dinero», dijo Orrillo a El Errante.
En ese sentido, se alertó sobre un posible caso de tráfico de terrenos; sin embargo, se señalo como otros presuntos responsables a aquellos sujetos que invadieron el lugar en 2015 y que fueron desalojados por la Policía en esas fechas.
Ante este caso, se pide la presencia de los funcionarios de Cultura y de los agentes del orden para recuperar el lugar puesto que se pone en riesgo los talleres líticos y geoglifos prehispánicos que se encuentran en el recinto.
Fotografía: Cortesía de José Carlos Orrillo